Actualmente la ropa sucia no se lava ya en casa en muchos hogares. Las lavanderías automáticas han aumentado su presencia de forma espectacular en las avenidas de las ciudades de nuestro país y el ver a gente haciendo la colada en los establecimientos a pie de calle no es algo que veamos ya solo en las películas estadounidenses. Este impulso se ha dado gracias a las franquicias, que junto a los nuevos modelos más avanzados tecnológicamente han ayudado a este crecimiento.
Según Luisa Mauset, la presidenta de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF) dice que esta etapa que se vive es debida entre otras razones al gran impulso que tiene la actividad y en un dato del que nunca se habla demasiado y es la forma en la que muchas cadenas han sabido reciclarse y ofertar un mayor número de servicios.
Más económico
La explosión de las lavanderías de autoservicio se ha visto impulsada por dos factores principales, un cambio de hábitos y el que realmente es más económico lavar la ropa sucia en una lavandería que hacerlo en el hogar.
Muchas veces a la hora de valorar esto no tenemos en cuenta que lavar en casa tiene un costo de energía, hay que comprar detergentes, agua, comprar o reparar electrodomésticos, etc. Todo ello sin dejar de tener en mente el gran impacto ambiental que causa. Actualmente estamos en una época en la que se está pasando de la cultura de la posesión a la de pago por uso.
Si que es cierto que en nuestro país hemos ido con retraso respecto al resto de naciones en este tema, ya que países vecinos como Italia, Portugal o Francia tienen una mayor tasa de centros que España.
Algunos apuntan a que la crisis económica o que cada vez haya menos tintorerías tradicionales por el precio y la calidad ha influido. Ahora parece que en España pasa lo mismo que en otros países y la utilización de las lavanderías se ha desarrollado a un ritmo enormemente rápido. Ahora hay más de 1000 se piensa que en siete u ocho años puede que se duplique el número.
Desde franquicias autoservicio como Washup piensan que unos modelos ergonómicos que hagan la labor de lavado, con la más alta tecnología y una capacidad adaptada a las necesidades son la clave del éxito en su caso y también en general en el sector. Esta empresa es de las que más ha crecido por la clara orientación al cliente que tienen, pero no debemos olvidar a marcas como la de Bloomest perteneciente a Miele. La marca comenzó sus actividades en España hace pocos años y ahora ya tiene más de 30 centros en funcionamiento, todo unido a un plan de expansión. A esto se le añaden otras marcas de lavadoras como LG, con Laundry Lounge, que está preparando su desarrollo.
Otras marcas nuevas que apuestan por la innovación y que lo combina con la lavandería artesanal a domicilio es Televavo. Lo que hay que tener siempre en cuenta es que el cuidado de la ropa va mucho más allá introducir la ropa en ala lavadora y ponerle detergente.
Las empresas son conscientes de que cada vez el público busca una mayor especialización y todo esto tiene una demanda cada vez mayor, todo ello debido a unos altos niveles en cuanto a la exigencia.
La apuesta por la ropa y por las personas
Volviendo a Wash-Up nos sorprendió el que tengan equipos automáticos que se encargan de la dosificación y que evitan el tener que estar añadiendo aditivos extra. Con estos sistemas, al final solo hay que llevar las prendas y no tienes que ir cargado de nada más (que ya bastante es).
En la firma aseguran haber investigado, probado, evolucionado y modificado todos los productos consumibles antes de proceder a la incorporación a su establecimiento. Para ello todos los productos ellos los testan y adaptan a sistemas de lavado Active Motion, por lo que tienen una formulación exclusiva.
A la hora de las programaciones, sus equipos vienen programados Ad-Hoc graduados de manera electrónica según las temperaturas, carga de agua o el tiempo de proceso del programa que se seleccione.
Al final, tanto ellos como muchas otras empresas, de lavanderías automáticas son testimonio de los grandes avances que se están produciendo en el sector. El resultado final es más económico y eficaz para el cliente.
